Terapia Visual

La terapia visual es un tratamiento que enseña al paciente a usar su visión de forma precisa e integrada con el resto de sentidos, de esta forma no solo mejora la visión, sino que también lo hace el rendimiento visual del paciente, y este lo nota en el colegio, trabajo o en la práctica de deportes.

 

La terapia visual está indicada para aquellos pacientes que tengan una mala eficacia visual, problemas de enfoque, convergencia, ambliopía (ojo vago), estrabismo, daño cerebral adquirido o problemas de percepción visual.

 

A través de un programa de terapia visual individualizado se pueden solucionar dificultades como frotarse los ojos, visión doble, dolores de cabeza, molestias al hacer tareas en cerca, pérdidas en la lectura, señalar el texto con el dedo y/o mover la cabeza al leer, que pueden estar relacionados con problemas de aprendizaje, enfermedades degenerativas, traumatismos craneoencefálicos.

Visión y aprendizaje

En el apartado  optometría puede encontrar más signos y síntomas que se puede mejorar mediante terapia visual.

 

Mediante una serie de ejercicios, el paciente aprende a tener control de todas las habilidades visuales: oculomotricidad, enfoque, convergencia, divergencia, visión periférica, localización espacial, estereopsis, discriminación visual, integración visuomotora.

 

De esta manera podrá usar su sistema visual eficazmente en cada una de sus actividades cotidianas.

 

Cuando el sistema visual trabaja de manera más eficaz, podemos recibir, procesar y comprender más información visual y en ello nos ayuda la terapia visual.